El mes de agosto se ha pasado
con una velocidad mucho mayor que la que empleó para llegar a nosotros. Hace
unos días alguien me comentaba que, por mucho que febrero pueda tener menos
días, agosto es con diferencia el mes más corto del año. Al final, y contra
todo pronóstico, no puedo por menos que darle la razón.
Y en ese “breve” espacio de
tiempo siempre se suelen apreciar cambios. También, por supuesto, en el
ambiente laboral.
No obstante, lo que no suele
variar es la sensación de inseguridad que siguen teniendo los usuarios de banca
en esta época tan convulsa. Las entidades han comercializado en los últimos
años una serie de productos complejos entre una clientela que, claramente, no
era la destinataria idónea de los mismos.
A las cláusulas suelo,
participaciones preferentes, permutas financieras o swaps, obligaciones
subordinadas, acciones de Bankia o hipotecas multidivisa, se han ido uniendo
otros productos como los ya conocidos Valores del Banco Santander, o los Bonos
convertibles en acciones del Banco Popular.
Todo evoluciona de una forma u
otra. Así, si bien algunas entidades evolucionan el “camuflaje” de estos
productos a fin de que sea más fácil comercializarlos, también los usuarios
evolucionan tomando la decisión de asesorarse antes de firmar o reclamar una
vez se ha producido el daño.
De ahí que en Ortiz Legal hayamos decidido también
evolucionar nuestros servicios y, como parte de ese avance, presentamos nuestro
nuevo logotipo y algunos cambios en nuestra página web. Porque queremos estar a
la altura de las circunstancias y de la confianza que tantos clientes han
depositado en nosotros.
Porque queremos seguir siendo
una poderosa defensa ante los abusos de la banca.
Para cualquier duda o consulta,
quedamos vuestra disposición en nuestra página web.
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